En solo tres meses se ha consolidado como uno de los fenómenos del 2020, y sigue causando furor con sus cifras millonarias.
Al igual que sucede con Among Us o Fortnite, hasta los famosos lo disfrutan: personajes como los ‘youtubers’ Ibai Llanos y El Rubius, o el futbolista argentino Kun Agüero han caído en la tentación de jugarlo.
CUANDO FUE SU LANZAMIENTO
Desde que se lanzó el pasado 4 de agosto, en sus primeras 24 horas de vida, Fall Guys superó el millón y medio de jugadores. En menos de un mes ya había vendido siete millones de copias en la versión para computador, a través de la plataforma Steam. Una cifra que aumentó hasta los 8,2 millones.
Todo esto convirtió su lanzamiento en el más exitoso de Steam desde Overwatch (que salió en 2016), e hizo que sus creadores se embolsillaran 185 millones de dólares solo durante el mes de agosto, según cifras aportadas por SuperData.
Además de sus inspiraciones más obvias, Fall Guys, desarrollado por Mediatonic, toma muchas mecánicas del género ‘battle royale’ y del exitoso videojuego Fortnite. Su estética, por otro lado, parece una mezcla entre el famoso juego Candy Crush y otro programa británico, ‘It’s a Knockout’
Mecánica de Fall Guys
La mecánica de Fall Guys es sencilla: 60 jugadores deben competir en varias pruebas de habilidad, al estilo de ‘Humor amarillo’, vestidos con anchos y vistosos disfraces que entorpecen los movimientos, empujándose unos a otros e intentando no caerse para no ser eliminados, el objetivo es aguantar ronda tras ronda.
A su vez, la multijugabilidad y ese tono que lo hace apto para casi todas las edades recuerda a Mario Party y a otros juegos del género ‘party games’ (idóneos para jugar en fiestas y de manera social). Por todo ello es, junto con Among Us, uno de los videojuegos que más éxito están teniendo en los tiempos de pandemia.
Carreras de obstáculos, equilibrios sobre una plataforma, caza de huevos, saltos sobre superficies giratorias, pelotas gigantes… Todo, en unos coloridos escenarios que recuerdan a los del citado programa japonés y todos sus sucesores televisivos. El resultado depende de una mezcla entre el azar y, sobre todo, la habilidad.